lunes, 18 de octubre de 2010

Una Mala Semana

Yo había quedado formalmente de escribir otra columna sobre situaciones chuscas pero la semana pasada fue una locura y compartirlo con ustedes podría ayudar a quitarme la mala suerte de encima (Hey! Ya ves? De todas formas la mala suerte se coló!).

Para empezar, estoy escribiendo una historia corta desde hace algo así como un mes que ya llegó a la página treinta; es verdad que sólo le falta el final, pero como te darás cuenta de corta sólo le queda el nombre. La semana pasada vi en una revista una convocatoria para un Concurso de Historias Cortas de Ficción (de hasta diez mil palabras, gracias a Dios) cuya fecha límite es el 15 de Nov; así que el tiempo empieza a apretar. Para acabarla de arreglar, la semana pasada fue terrible y no logré avanzar de forma decente, así que ya empiezo a sentir que el tiempo se me va entre las manos y no voy a poder concluir esto. Por cierto, mencioné que el 4 de Nov. empiezan mis clases de francés en la universidad?

Aquí en Canadá el lunes fue Acción de Gracias y, obviamente, no hubo escuela ni trabajo; esta bien, no importa, igual nos cae bien un poco de convivencia familiar ocasional. El martes mi hija mayor no tuvo escuela, así que la chiquitina quiso quedarse a jugar con su "tumana", ok, ok; otro día perdido. El miércoles llega y mi adorado maridito tiene que viajar a NY por asuntos de trabajo... que me pasó a mí? Yo tuve que llevar a ambas niñas a la escuela, recoger el desastre de los dos días anteriores, y recoger a las dos latosas. Yo se que esta es la historia de la mayoría de las mamas pero como no es mi rutina, a mí se me cuatrapean las patas. Llegó el jueves y, no te lo imaginas?, mi marido perdió su vuelo de regreso ayer; llega hoy y tengo que recogerlo en el aeropuerto a las DOCE. En serio? A estas alturas me pregunto si habrá algún designio divino para impedirme trabajar esta semana.

El viernes fue mi "mejor" día; si no tomas en cuenta que cayó un nuevo Diluvio Universal y me empapé cuando fui a recoger a mi hija de la escuela; pero hey, al menos tuve cuatro horas para escribir. El sábado ni siquiera lo intenté, decidí regalarme un terapéutico día de shopping; 150 dolares despúes era feliz como lombriz. Por fin llegó el domingo, aaaahhh!, excepto que mis hijas desayunaron gallo y se querían matar, llegamos tardísimo a su clase de gimnasia, y al llegar recuerdo que ese era el último día para pagar las fotos del gym... yo ni siquiera había desayunado! Al carajo con todo. Le llamo a mi marido, lo saco de su clase en la universidad y le lleno la oreja de detalles de mi maravillosa semana; le digo que mejor vea como carambas va a solucionar esto antes de que un asteroide se estrelle con la tierra y decida darme en la cabeza.

Después de este relajante ejercicio, me compré un delicioso cafe ENORME y una dona y me senté a admirar a mis pollos en su clase. Mi marido pagó las fotos despúes e hizo su mejor labor para mantener a las niñas entretenidas jugando en la calle. Sospecho que lo hizo más como estrategia de supervivencia que por la bondad de su corazón pero no me importó. Me senté a escribir.

Aquí la cosa se complica aún más. No se si hayan oído hablar del Bloqueo de Escritor (Writer's Block); no estoy muy segura de qué tanto abarca pero es una de esas cosas que sé que cuando la vea, la voy a reconocer. Pues ayer creo que conocí una de sus muchas caras; tras una semana tan atropellada el domingo mi mente creativa no fluía como siempre; normalmente escribo unas cuatro hojas tras seis o siete horas de trabajo, no tengo idea de si es un buen estándar pero es a lo que estoy acostumbrada. Ayer escribí una hoja, UNA; y ni siquiera estoy segura de que sea buena.

Tengo dos o tres ideas más para proyectos diferentes y me distraen muchísimo de éste; estoy comprometida a terminarlo antes de iniciar otro pero a veces es muy difícil. En ciertas ocasiones me parece que sólo estoy escribiendo para terminar esta historia y poderme mover a la siguiente. Me he prometido a mí misma terminar este cuento con la mejor calidad de la que soy capaz y, aunque a veces me parece que nuca va a suceder, lo voy a hacer.

Ya te contaré como acaba esta historia pero mientras platícame si alguna vez has pasado por algo similar y como hiciste para concluir tu tarea.

Buena semana!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario